En la actualidad son muchos los propietarios de viviendas que se valoran el atractivo de las chimeneas de leña contemporáneas no sólo por su estética y buena apariencia, su fiabilidad o su rendimiento, sino también por el hecho de que este tipo de sistemas de calefacción no necesitan hacer uso de fuentes de energía como la electricidad, generada a partir de centrales de energía proveniente de combustibles fósiles, o directamente alimentadas por gas, dos combustibles a partir de fuentes de energía no renovables.

Estufas modernas y respeto al medio ambiente

Afortunadamente, la innovación moderna y la tecnología más punteras significan que las chimeneas que están en el mercado actualmente son mucho más eficientes energéticamente y limpias con el medio ambiente, de lo que lo fueron nunca sus predecesoras. Si usted está considerando una compra estufa, es importante echar un vistazo a algunas de las ventajas medioambientales que las estufas modernas pueden aportar. Desde Chimeneas Llofrio queremos hacer un breve repaso por algunas de las ventajas y novedades que una chimenea puede aportar a nuestro entorno.

 

Chimeneas fabricadas para la eficiencia

Las chimeneas y estufas actuales están cuidadosamente creadas para proporcionar la máxima eficiencia energética. Esto no sólo ayuda a mejorar el gasto económico que supone su uso continuado durante el invierno, sino que también significa un menor porcentaje de emisiones producidas durante la combustión que en el caso de los modelos anteriores, en muchos casos, simplemente porque se está utilizando menos combustible, en otros, porque incluyen brillantes soluciones técnicas que mejoran las emisiones. Innovaciones como la mejora de los sistemas de combustión, la inclusión de temporizadores y/o de controles computarizados convierten los sistemas modernos en menos contaminantes que nunca.

Este es el caso de los sistemas de estufas y calderas de pellets, capaces de administrar el combustible al sistema de manera pormenorizada, optimizando el funcionamiento y rentabilizando cada milímetro cúbico de combustible.

 

Biomasa y nuevas energías calefactoras

Además de estufas alimentadas por gas o derivados del petróleo -fuentes de energía no renovables que causan con frecuencia la contaminación del entorno, tanto durante su producción, como durante su consumo- actualmente existen numerosas alternativas ecológicas disponibles. Como apuntábamos, los pellets de madera son una innovación relativamente reciente que está atrayendo un interés considerable, ya que son una alternativa económica y ecológica a los combustibles fósiles.

Confeccionados a partir de material verde sostenible, la naturaleza densa de pellets de madera permite que se empleen como combustible muy bajo en emisiones contaminantes, generando, sin embargo, el máximo calor con un desembolso económico mínimo. Este tipo de estufas presentan una eficiencia de hasta el 95%, lo que maximiza los beneficios, eliminando multitud de problemas para el entorno.

 

Hechas para durar

Un último punto a destacar es que durante años muchos de los sistemas de calefacción empleados en los hogares adolecían de una escasa durabilidad. Esto supone también un problema medioambiental en el medio y el largo plazo, dado que los residuos generados por sistemas enteros que se desechan con el tiempo -viejas estufas de aceite, eléctricas o de gas-.

En la actualidad, la tecnología no sólo ha puesto el acento en mejorar el rendimiento de los sistemas, sino que ha vuelto a ser importante que el producto no sea de usar y tirar. Se busca un rendimiento a largo plazo, con bajo mantenimiento y que nos permita poner en valor la inversión a muy largo plazo. Siguiendo este razonamiento, las chimeneas clásicas han vuelto a estar de moda, en su modalidad de sistema central de calefacción. Gracias a sistemas de tuberías y pequeñas consolas calefactoras es hoy posible calentar casas enteras haciendo uso del tradicional fuego y de una buena chimenea.